La Melena de león, como todo hongo adaptógeno, ayuda a mejorar de forma inespecífica los síntomas del estrés fisiológico y mental.

Y va más allá: cumple una función clave sobre el sistema nervioso como neuroregenerador, y favorece la neuroplasticidad, aumentando el tamaño y el número de las conexiones neuronales.

También es uno de los más elegidos en la medicina integrativa por sus beneficios en el sistema digestivo, su capacidad antiinflamatoria, su acción antiulcerosa y por ser uno de los mejores prebióticos conocidos. Este hongo medicinal de amplio espectro es muy buscado como hipoglucemiante, hipocolesterolémico y hepatoprotector.

• Reducir el déficit cognitivo, de atención y la falta de memoria
• Prevenir y tratar enfermedades neurodegenerativas y neuroinflamatorias
• Proveer protección digestiva integral (antiulceroso y prebiótico): disbiosis, sibo, úlceras, gastritis, colon irritable
• Prevenir enfermedades intestinales inflamatorias
• Brindar protección hepática
• Combatir el insomnio y la fatiga crónica
• Reducir trastornos metabólicos, diabetes tipo II, síndrome metabólico, dislipidemias

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